Vestido a lo pollock

Como este fin de semana ha hecho buen tiempo, por fin he podido irme al campo a hacer las fotos chulas que me faltaban para poder publicar este proyecto. Todo empezó cuando vi el vestido inspiración Pollock en el blog Dare to Diy de Silvia Salas y me encantó!!! La idea se quedó en mi lista de tareas, hasta que encontré un vestido blanco en las rebajas con el que poder dar rienda suelta a mi imaginación.
Me apetecía darle color, no demasiado, pero colores vivos que resaltarán y le dieran un toque diferente. Aprovechando una mañana soleada que me dejaron sola en casa, convertí el patio en un taller improvisado, y empezó la locura de los colores!!

Primero busqué un poco por Internet obras de Pollock que me dieran mi propia inspiración, después hice un boceto de más o menos lo que tenía pensado, aunque al tirar pintura nunca sabes el resultado final y eso es lo que lo hace más interesante y casual.

Para ponerse manos a la obra, lo primero es prepararlo todo bien para no manchar nada. Aprovechando revistas viejas y cartones forramos todo el suelo donde pueda caer pintura. Sacamos el kit de pinturas, una brocha, guantes y muy importante el mp3 con la música para hacerlo con ritmo y alegría.También es adecuado tener un cubo con agua y una esponja por si salpica algo poder limpiarlo al momento.  Lo ideal sería tener un maniquí para colocar el vestido, pero como no lo tengo... pues hay que buscar soluciones con cosas que tengamos por casa, y yo he puesto una sombrilla pequeñita un poco abierta, envuelta en una bolsa grande de basura para no mancharla. Ahí se monta el vestido y se rellena con unas bolsas para que el vuelo quede bien estirado.

Empezamos con un verde turquesa muy bonito, nos ponemos los guantes, mojamos la brocha sin que llegue a gotear y pasamos el dedo para que caiga la salpicadura en el vestido. Vamos repitiendo la operación hasta que nos vaya gustando como queda.

Continuamos con un rosa chicle, salpicando al lado del turquesa, por delante del vestido y al revés por la parte de atrás. Y en la parte de arriba un poco a lo loco para que sea más original.

Seguimos con amarillo, siguiendo la técnica anterior y aunque no lo tenía pensado, al final también utilicé color negro, que le da un contraste muy bonito. Lo interesante en este proyecto es que no hay nada medido, y que puedes improvisar, lanzar más o menos pintura según te vaya gustando y que quedé todo un poco revuelto q a veces también mola hacer cosas sin tener que estar siguiendo un patrón ni unas instrucciones.

Me apetece un montón volver a hacer algo de este estilo, pero todavía no he encontrado la inspiración de como y con que material, espero encontrarla pronto y volver a compartir con vosotros otra de mis locuras!!

Sandra