Para comenzar hacemos un boceto de la forma en lápiz sobre la piedra así tenemos claro por donde tenemos que ir pintando.
Lo bueno de trabajar en este tipo de piedra es que está tan redondita y pulida que podremos dibujar con facilidad, y si en lápiz nos equivocamos lo podemos borrar con una goma.
Cuando ya tenemos todo dibujado comenzamos con la pintura por la parte más difícil que yo considero que son los ojos.
Cuando hemos acabado con un color, para pintar el próximo lo mejor es que esperemos a que se seque bien para que no se mezcle, y mientras podemos ir pintando en otras partes, como por ejemplo el pico y las patas.
Para hacer las plumas, primero pintamos el fondo y cuando esta seco damos pinceladas en tonos más claros y más oscuros para crear el efecto.
Alrededor de los ojos hemos dejado la piedra sin pintar para que se vea que es una piedra y queda muy bonito.
Esté búho formara parte de otro proyecto más chulo con algunos de sus amigos que iré subiendo según los vaya pintando, porque me ha molado tanto este proyecto que quiero hacer una composición de piedras pintadas poco a poco.
Sandra
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